La primera jornada de “Prevención de las Adicciones en el Ámbito Laboral” se realizó en la sede del Sindicato de AEFIP Capital, con la presencia del titular de la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas (SEDRONAR), Roberto Moro, y del Obispo de San Isidro y Presidente de Cáritas Argentina, Monseñor Oscar Ojea.
El encuentro estuvo organizado conjuntamente entre la Universidad Placido Marín, los Centros Barriales Diocesanos dependientes del Obispado de San Isidro y la recientemente creada Red Sindical para la Formación (espacio sindical conformado por AEFIP, Municipales de Capital, Ceramistas, Empleados de Comercio Zona Oeste, Empleados del Vidrio y Trabajadores Bursátiles, entre otras organizaciones gremiales).
El objetivo de la jornada fue presentar un plan de formación para la lucha de las adicciones en el trabajo, diseñado conjuntamente entre la Red Sindical y la Universidad, de un mes de duración (cinco clases) orientado a los delegados de las organizaciones gremiales.
Al respecto, el Secretario General de AEFIP Capital, Pablo Flores, manifestó la necesidad de abordar la temática en los sindicatos. “En el marco de la emergencia nacional implementada por el Gobierno a fines de año pasado en relación al tema de las adicciones, es necesario redoblar los esfuerzos en cada uno de los lugares de trabajo para ayudar a aquellos compañeros que sufren una adicción”, indicó.
Opinó además que “nada mejor que hacerlo con la Iglesia, las Universidades y el Gobierno para que el trabajo sea conjunto y se pueda atacar integralmente”.
Posteriormente, el titular del SEDRONAR, Roberto Moro, celebró el encuentro y describió las acciones de la Secretaria en la prevención y en la difusión contra las adicciones. “Para empezar a resolver el problema, nada mejor que trabajar, desde el Estado como actor principal, con los gremios, la Iglesia y las organizaciones sociales”, expresó.
El cierre de la jornada estuvo a cargo de Moseñor Oscar Ojea, quien describió el trabajo de su Diócesis en la zona de San Isidro y la conformación de los Centros Barriales Diocesanos, espacios que se encargan de contener a los jóvenes en situación de calles que sufren además el flagelo de la droga.
El titular de Caritas instó a los jóvenes de las organizaciones gremiales a seguir trabajando en la temática de las adicciones y –tomando las palabras del Papa Francisco- a comprender al adicto como “una persona que necesita ayuda, que necesita ser escuchado, comprendido, contenido y, si es posible, sanado”.
