La Organización Panamericana de la Salud (OPS) llamó a reforzar la lucha contra la hepatits en la región, una afección que afecta a millones de personas en las Américas, y mencionó a la Argentina, que redujo un 80% los casos producidos por el virus A en cinco años.
El organismo indicó que la gravedad de la incidencia de la enfermedad esta dada en que una de cada 12 personas en el mundo padece alguno de los cinco tipos de hepatitis pero la mayoría de las personas afectadas no lo saben y no recibieron un diagnóstico ni un tratamiento.
«El riesgo es para todos, y las medidas educativas e informativas, así como los esfuerzos por mejorar las condiciones sanitarias y de acceso al agua y a los alimentos no contaminados es fundamental, igual que la vacunación», dijo Mirta Roses, directora de la OPS.
El Día Mundial contra estas patologías virales «debe servir para recordar la importancia de las hepatitis, su impacto en la salud individual y colectiva», destacó Roses.
Luis Castellanos, coordinador para Prevención y Control de Enfermedades Transmisibles de la OPS, destacó que la región «enfrenta desafíos en materia de recolección de datos, prevención y control para alcanzar a las poblaciones que están en riesgo». Advirtió también que se enfrentan desafíos en materia de diagnóstico y en la realización de los tratamientos.
La OPS destacó que en la Argentina, la introducción de la vacuna contra la hepatitis A logró la reducción de más del 80% de los casos en un período de cinco años, mientras que Cuba mostró distintas técnicas utilizadas en los últimos 25 años para ir hacia la eliminación de la hepatitis B.
El organismo agregó que Argentina, Panamá y Uruguay introdujeron la vacuna contra la hepatitis A en sus programas de inmunización infantil y que todos los países de América Latina y el Caribe tienen la vacuna contra la hepatitis B en esos programas.
Precisó además que en América Latina y el Caribe más del 99% de las unidades de sangre donadas son tamizadas para los virus de las hepatitis B y C.